El hidrógeno, una alternativa para los navíos

Los barcos eléctricos son una apuesta clara para una movilidad sin emisiones.  De forma progresiva se va implantando, pero no es la única alternativa. El hidrógeno se plantea como otra de las soluciones. Aunque su implantación, de momento, es mucho menor.

Aún así los fabricantes como Toyota, Daimler, Hyundai u Honda siguen apostando por este combustible. De hecho la japonesa Toyota en 2017 vendió 3.000 unidades de su Mirai, su berlina que funciona con hidrógeno.

Ventajas del hidrógeno

  • Movilidad con cero emisiones  y, por tanto, respetuoso con el medio ambiente. Solo emite vapor de agua.
  • Autonomía aceptable.
  • Paradas para repostar cortas.
  • Primer barco de hidrógeno del mundo
  • Menos peso. Al no tener que cargar con las pesadas baterías.

El primer barco a hidrógeno

El Energy Observer es el primer barco del mundo a hidrógeno. El catamarán, que tiene dos cascos idénticos, obtiene la energía del sol mediante placas solares. Asimismo dispone de generadores eólicos y maremotrices.

Parte de esta energía se destina a captar el hidrógeno del agua, mediante hidrólisis. Esto quiere decir que puede funcionar como cualquier velero, siempre y cuando el barco no sufra ningún tipo de avería.

Quizá en los automóviles, este sistema de hidrógeno sea menos eficiente. En cambio, en los barcos tiene mucho sentido. Porque la energía se almacena en hidrógeno y no en baterías de peso como en el caso de los eléctricos. Con lo que hay un ahorro de energía en el desplazamiento, al pesar menos.

En el caso del Energy Observer, se trata de mover 28 toneladas de peso. Precisamente los grandes barcos son una gran fuente de contaminación. Su combustible tiene un alto índice de impurezas y bunker fuel.

El Energy Observer fue botado en 2017. En la actualidad está recorriendo los puertos del Mar Mediterráneo. Está previsto que después vaya hacia el norte europeo hasta completar su destino que será Japón. Se estima que habrá arribado a puerto en 2020.